sábado, 2 de abril de 2011

ISLANDIA, LA REVOLUCIÓN LLEGA DEL NORTE: OTRA EUROPA ES POSIBLE






Cuando estamos hablando continuamente de las Revueltas o la Revolución Magrebí, los medios de comunicación están dejando de lado una auténtica Revolución de corte Europeo, pacífica y, en ciertos puntos, antiliberal. La llamada en algunos ámbitos Revolución Islandesa, está siendo un ejemplo a seguir en Europa cuando estamos hartos de escuchar los ejemplos Británico, Francés o Alemán que, al fin y al cabo, son países que continúan sometiéndose al mando neoliberal del mundo capitalista global.


EL ORIGEN DE ISLANDIA

Islandia es un país del norte de Europa. Dependiente de otros países nórdicos como Noruega o Dinamarca, no consiguió una independencia real hasta el siglo XX. Aún así, el origen de su población es Nórdico y Gaélico. Curiosamente, por un estudio genético se demostró que la mayoría de hombres islandeses son
de origen Nórdico mientras que las mujeres son en su mayoría de origen Irlandés. Los primeros pobladores se documentan entre el S. VIII y IX siendo en origen tanto Nórdicos como Irlandeses y Escoceses. Hasta el S. X fueron llegando paulatinamente colonos Nórdicos muchos de los cuales querían huir de la influencia cristiana que estaba llegando a territorios nórdicos como Noruega o Suecia; querían seguir adorando a Thor, Wotan o Freja. Estos llegaban en ocasiones con esclavos de origen Irlandés. En 1262 Islandia pasó a manos de la corona Noruega, la cual se unió a Suecia y Dinamarca en la Unión de Kalmar durante el S. XIV. Cuando en 1814, después de las guerras Napoleónicas, Dinamarca y Noruega se dividió en dos reinos independientes, Islandia pasó a depender de Dinamarca. Finalmente, en 1944 finalizando la II Guerra Mundial, por medio de un referéndum, el pueblo islandés eligió pasar a ser una república independiente, lo cual fue su inicio como Estado independiente.

CARACTERÍSTICAS DE ISLANDIA

Vamos a dar algunos retazos de lo que es el pueblo islandés para mostrar algunas características particulares de este pueblo de origen Europeo, con una de las idiosincrasias más puramente Europea que mantiene la tradición de los orígenes  en muchas facetas y, sin embargo, es esa gran desconocida para el resto de hermanos Europeos.

Política:

Islandia es una monarquía representativa donde el presidente se elije por elecciones directas a la presidencia. Como curiosidades podemos decir tres cosas: una es que nunca se ha gobernado por mayoría absoluta, siempre por coaliciones entre dos o más partidos; la primera mujer presidente elegida directamente en el mundo fue la islandesa Vigdís Finnbogadóttir; además podemos añadir que Islandia sea el país con la democracia parlamentaria más antigua del mundo ya que su parlamento moderno fundado en 1845 se consideró una restauración de la Asamblea tradicional de estructura clánica constituida en 930 durante el periodo de la Mancomunidad Islandesa (930 – 1262) y que duró cerca de 8 siglos ya que fue suspendida en 1799.

Energía:

Islandia es un país energéticamente casi autosuficiente. Su base energética son las fuentes de energía renovables Geotérmica e Hidráulica que abastecen toda la electricidad al país. Son fuentes de energía que disponen permanentemente por su localización geográfica. Carecen de Petróleo o Gas Natural así que lo tienen que importar, aún así sería solo el 20 % de la energía consumida. A pesar de que el único transporte interno utilizado es el automovilístico, Islandia es uno de los pocos países del mundo que cuenta con estaciones de hidrógeno para autos con pila de combustible, demostrando la búsqueda de autosuficiencia energética, básico para obtener una independencia económica sustancial.

Medios de Comunicación:

El programa más exportado al exterior es precisamente un programa infantil, “Lazy Town”. Islandia dispone desde el 17 de Junio de 2010 una de las medidas de protección a los medios de comunicación más fuertes del mundo con la ley para proteger la libertad de expresión de los periodistas y escritores. Al mismo tiempo es uno de los países más avanzados en el uso de Internet, ya que más del 85% de su población utiliza frecuentemente este medio de comunicación.

Demografía:

Los islandeses le dan mucha importancia a los orígenes así que poseen uno de los registros genealógicos más importantes del mundo remontándose en parte a sus orígenes. El trabajo de investigación genética llevada a cabo por una empresa biofarmacéutica privada para analizar enfermedades genéticas, que intentaba albergar información de todos los habitantes del país, ha llevado a confirmar sus orígenes puramente nórdicos e irlandeses como hemos dicho anteriormente con preferencia en los hombres el primer caso y mujeres el segundo.

Cultura y Religión:

Islandés, el idioma oficial procede del Nórdico antiguo. Al mismo tiempo es la única lengua viva que todavía utiliza la escritura Rúnica. En lugar de utilizar apellidos, utilizan patronímicos con lo que sus nombres serían, por ejemplo, Ólafur Jónsson («Ólafur, hijo de Jón») o Katrín Karlsdóttir («Katrín, hija de Karl»). Con todo ello, se acercan a la tradición más primitiva y pura de Europa.

Aunque la religión mayoritaria es la Luterana, en Islandia la religión no cristiana más grande es la Asatrú. Religión calificada como Neopagana, Islandia sería el primer país en hacer oficial una religión surgida de la tradición más primigenia Europea. . Al mismo tiempo las creencias tradicionales están muy generalizadas habiendo algunos islandeses que creen en los Elfos, por ejemplo.

Respecto a la literatura, hay que remarcar Islandia como el origen de las Sagas y Eddas Nórdicas más importantes, una de la literatura tradicional más importante de nuestra cultura Europea.
Economía:

Islandia es un país con una economía de libre mercado, con unos impuestos relativamente bajos con referencia a otros pero que mantiene un estado de bienestar que provee de asistencia sanitaria universal y educación superior gratuita a sus ciudadanos.

Históricamente, la economía islandesa depende de la pesca, el miedo a perder el control sobre su economía y sus recursos pesqueros y naturales es lo que lleva a la población islandesa a rechazar formar parte de la UE (de forma inteligente por otra parte), aunque en los últimos años también ha crecido en sectores como el Software o Biotecnología, así como en Turismo.

Un fuerte crecimiento económico llevó a Islandia en ser el primer país del mundo en índice de desarrollo humano en 2007, demostrando que, aunque su economía sea capitalista formando parte del sistema, saben hacer las cosas bien.

LA REVOLUCIÓN ISLANDESA

La revolución Islandesa tiene su origen en la crisis económica de 2008-2010. Dicha revolución se fundamenta en las medidas tanto políticas como económicas que se llevaron a cabo. Medidas realmente revolucionarias con respecto a la esclavitud capitalista neoliberal, global y mundialista de los países pertenecientes a la nefasta UE. Medidas que deberían de ser punto de referencia real para Europa, para una Europa que se arrancara de cuajo la influencia de la UE que se está dedicando a destruir tanto las Identidades particulares de los pueblos europeos así como de su propia esencia. Islandia hoy demuestra que otra Europa es posible. Una corriente que defienda nuestra Identidad, a los ciudadanos autóctonos Europeos (la inmigración mayoritaria y prácticamente única de Islandia son los Eslavos de Polonia) y una política y economía que prime la persona sobre las entidades.
Precisamente, las tres grandes características a destacar de dicha Revolución (que no entraremos a desarrollar ya que está suficientemente explicada en la noticia que nos acompaña) son las siguientes:

-          En primer lugar la característica principal es la forma en llevar a cabo dicha revolución. Cuando se está hablando continuamente de las revueltas magrebís, Islandia ha demostrado que se puede hacer de forma pacífica con el apoyo común de una población y unos gobernantes que parecen buscar el bien global de la comunidad demostrando la superioridad civil de esta sociedad. La decisión de las autoridades políticas de abandonar cuando no pueden dar solución a los problemas, es un ejemplo a seguir.
-          En segundo lugar, el llevar a cabo una nacionalización de la banca y además, la de decidir por referéndum (autentica democracia) si el Estado se hacía cargo de la deuda contraída por los bancos privados (cuando en España por ejemplo el señor Zapatero, sin nacionalizar la banca y sin referéndum, presta 100 mil millones de dinero público a la banca y en otros países europeos sucedió otro tanto) negándose el 90% de la población a asumirla es otra demostración de superioridad moral de esta sociedad. El punto culminante sería la encarcelación de Banqueros y Políticos como responsables directos de la crisis que padecía la población islandesa. Todo un ejemplo para la población esclava de la UE. (Como se puede apreciar en el siguiente enlace http://identidadegalega.blogia.com/2011/032401-islandia-el-pais-que-castiga-a-los-banqueros-culpables-de-la-crisis.php )
-          La tercera característica importante sería la creación de una Asamblea Constituyente de 25 miembros civiles no políticos siendo “ciudadanos de a pie” que fueron elegidos por los ciudadanos islandeses para reformar la constitución. ¡¡¡SIN PALABRAS!!!. La mayor demostración democrática después de Atenas.

  CONCLUSIÓN

  

    La esencia de la tradición de nuestra tierra llamada Europa se encuentra en la actualidad en una remota isla del Norte llamada Islandia. La guía a seguir para remontar nuestra Identidad en estos tiempos de caos global se encuentra en la isla que el navegante Piteas de Marsella reconoció con el nombre mítico de Thule. La Thule mítica en el imaginario de nuestro origen nórdico. Venimos del Norte, y al norte hay que volver la mirada para descubrir la revolución que nos viene de Thule. Nuestra auténtica revolución, la revolución de Europa para los europeos de verdad.


  
  


 
   Islandia, Una revolución silenciada

    La lección de Islandia al mundo

    Pedro Pozas Terrados.- En Islandia, el pueblo ha hecho dimitir a un gobierno al completo, se nacionalizaron los principales bancos, se decidió no pagar la deuda que estos han creado con Gran Bretaña y Holanda a causa de su mala política financiera y se acaba de crear una asamblea popular para reescribir su constitución. Y todo ello de forma pacífica. Toda una revolución contra el poder que nos ha conducido hasta la crisis actual.
    He aquí, por qué no se han dado a conocer estos hechos ocurridos durante dos años: ¿Qué pasaría si el resto de ciudadanos europeos tomaran ejemplo? Esta es, brevemente, la historia de los hechos:
2  2008. Se nacionaliza el principal banco del país. La moneda se desploma, la bolsa suspende su actividad. El país está en bancarrota.
    2009. Las protestas ciudadanas frente al Parlamento logran que se convoquen elecciones anticipadas y provocan la dimisión del primer ministro, y de todo su gobierno en bloque. Continúa la pésima situación económica del país.
    Mediante una ley se propone la devolución de la deuda a GB y Holanda mediante el pago de 3.500 millones de euros, suma que pagarán todos las familias islandesas mensualmente durante los próximos 15 años al 5,5% de interés.
    2010. La gente se vuelve a echar a la calle y solicita someter la ley a referéndum.
    En enero de 2010 el presidente se niega a ratificarla y anuncia que habrá consulta popular.
    En marzo se celebra el referéndum y el NO al pago de la deuda arrasa con un 93% de los votos. 
    A todo esto, el Gobierno ha iniciado una investigación para dirimir jurídicamente las responsabilidades de la crisis. Comienzan las detenciones de varios banqueros y altos ejecutivos. La Interpol dicta una orden, y todos los banqueros implicados, abandonan el país.
    En este contexto de crisis, se elige una asamblea para redactar una nueva constitución que recoja las lecciones aprendidas de la crisis y que sustituya a la actual, una copia de la constitución danesa.
    Para ello, se recurre directamente al pueblo soberano. Se eligen 25 ciudadanos sin filiación política de los 522 que se han presentado a las candidaturas, para lo cual sólo era necesario ser mayor de edad y tener el apoyo de 30 personas.
    La asamblea constitucional comenzará su trabajo en febrero de 2011 y presentará un proyecto de carta magna a partir de las recomendaciones consensuadas en distintas asambleas que se celebrarán por todo el país.
    Deberá ser aprobada por el actual Parlamento y por el que se constituya tras las próximas elecciones legislativas.
    Esta es la breve historia de la Revolución Islandesa: dimisión de todo un gobierno en bloque, nacionalización de la banca, referéndum para que el pueblo decida sobre las decisiones económicas trascendentales, encarcelación de responsables de la crisis y reescritura de la constitución por los ciudadanos.
¿  Se nos ha hablado de esto en los medios de comunicación europeos? ¿Se ha comentado en las tertulias políticas radiofónicas? ¿Se han visto imágenes de los hechos por la TV? Claro que no.
    El pueblo islandés ha sabido dar una lección a toda Europa, plantándole cara al sistema y dando una lección de democracia al resto del mundo.

25 Febrero, 2011
Por admin
TdE/Los islandeses se han rebelado contra su gobierno, exigiendo que no se pague la deuda de los bancos.
La información ha sido siempre un arma de poder. Controlar la información es controlar lo que la gente conoce y, por lo tanto, condicionar su visión de la realidad y, con ella, sus acciones. En nuestras sociedades mediáticas, la información se ha convertido en el centro de la batalla política, pues el acceso de los ciudadanos al mundo, a la realidad, se realiza a través de los medios de comunicación. Su potencia se ha podido comprobar estos días con los sucesos del Magreb, donde las movilizaciones se han extendido como la pólvora gracias a la televisión e internet.
Lo que no aparece en los medios, no sucede. Esa es la máxima que se ha debido de aplicar con el extrañísimo caso de Islandia. Sí, Islandia. Islandia debería ser noticia, portada de informativos. ¿Por qué? Pues porque en Islandia, la población ha tomado las calles, cacerola en mano, para mostrar su radical oposición a su gobierno. Y la movilización ciudadana no solo ha provocado dos crisis de gobierno, sino que ha forzado un proceso constituyente, la redacción de una nueva Constitución que evite que se repitan situaciones como las que se han producido a lo largo de esta crisis global. ¿Y qué situaciones son esas?
Los tres bancos principales de Islandia se lanzaron, al abrigo del neoliberalismo rampante, a una política de compra de activos y productos fuera de sus fronteras. Como ha ocurrido con numerosas entidades bancarias, esos productos resultaron ser basura, de esa que a Rodrigo Rato le parecía una estupenda apuesta financiera cuando era director del FMI, lo que llevó a las citadas entidades a la bancarrota por sus deudas en Holanda y Gran Bretaña. El gobierno islandés procedió a nacionalizar los bancos y a asumir sus deudas. Ello supuso que cada ciudadano de Islandia se encontrara con una deuda de 12.000 euros. Como ocurre por todas partes del planeta, la mala gestión de entidades privadas debe ser enjugada por instituciones públicas y, por lo tanto, por la ciudadanía en su conjunto.
La diferencia radica en que los ciudadanos islandeses, ante el escándalo de la situación –escándalo que es asimilable al que sucede en todos los países occidentales– se rebelaron contra su gobierno. Así, se lanzaron a la calle, exigiendo que no se pagara la deuda de otros. Unos otros que cuando tienen beneficios no se acuerdan de los ciudadanos y los estados, pero que recurren ansiosos a ellos cuando se encuentran en situaciones de apuro. El gobierno, que insistía en pagar la deuda, por la presión del FMI y de los gobiernos de Holanda y Gran Bretaña, se vio forzado a convocar un referéndum, en el que el 93% de la población se negó a pagar la deuda de otros. Ello provocó una crisis política de profundas dimensiones que ha desembocado en dos crisis de gobierno y en la creación de una comisión de ciudadanos de a pie encargados de redactar una nueva Constitución. Los islandeses se han hartado de que les tomen el pelo y han decidido tomar su destino en sus propias manos.
El caso es sorprendente. Pero lo que quizá sea más sorprendente es que este proceso, que se viene desarrollando en los dos últimos años y que está en plena efervescencia, con una ofensiva del Partido Conservador para declarar ilegal el proceso constituyente (¡qué miedo tienen los conservadores de toda laya a la ciudadanía!), que este proceso, insisto, no haya merecido un solo comentario en los informativos. Cuando los volcanes de Islandia estallaron hace meses, sus cenizas cubrieron Europa y provocaron un enorme caos aéreo. Probablemente, el temor de que las cenizas del volcán político islandés provocaran efectos sociales en Europa es una explicación plausible de este silencio. El efecto contagio, lo hemos visto en el Magreb, es una de las características de la sociedad mediática.
Los islandeses nos muestran un camino diferente para salir de la crisis. Tan sencillo como decir basta y recordar que la política, y quienes la ejercen, debe estar al servicio de la ciudadanía, y no de los intereses de entidades privadas cuya voracidad, cuyo egoísmo, cuya falta de ética (véase el caso de los recientes bonus por 25 millones de euros a directivos de Cajamadrid) está en el origen de esta crisis. En Islandia se ha cursado orden de detención contra los ejecutivos de las entidades en cuestión. En Islandia, arrinconando a los partidos sistémicos, empeñados, como aquí, en someterse a los dictados de los mercados, la ciudadanía se ha convertido en protagonista. Los islandeses lo han dicho claro: que las deudas las paguen los que las generan, que la crisis la pague los que la han producido.
Profesor de Filosofía. Universidad de Zaragoza


1 comentario:

  1. http://mentiromania.blogspot.com/2011/05/izquierda-y-derecha.html

    http://retribucionjusta.blogspot.com/2010/04/pleonexia.html

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