WEST SIDE CATALUNYA STORY

Hasta los mossos d'Esquadra ven la necesidad de reevaluar la estrategia ante "los nuevos grupos juveniles violentos organizados" como llama el ministerio del Interior a las mal llamadas "Bandas Latinas" (Queremos reivindicar al autentico latino que era un pueblo indoeuropeo antiguo nada que ver con los aborígenes que habitan América más allá de la frontera Estadounidense que se deberían denominar como mucho Indios o Mestizos, para nada Latinos, desvirtuando a los descendientes de los auténticos latinos que existen en Europa). No nos preocupemos, la Ópera "West Side Story" ya está en España solo que no está edulcorada con Natalie Wood. Habrá que tener cuidado con los hijos pequeños ya que estas bandas empezaron a "absorver" niños indios para después atraer a Europeos, sobre todo a las niñas españolas que compiten con las Sudamericanas. A tener en cuenta la ley del menor cuando tenemos pandilleros menores de edad dando navajazos al corazón. ¿Cuantos miembros de estas bandas cabrían en un avión rumbo a la selva americana que es de donde no tenían que haber salido?. Y pensar que algunas de ellas están subvencionadas como "asociaciones culturales" como los Latin Kings y los Ñetas... No hay que subvencionar, sino ilegalizar y sacar de España. No todo el problema inmigrante en cataluña viene de los musulmanes. La verdad es que los musulmanes se apoderan de la cultura; las bandas americanas de las calles y los chinos de la economía. Algo hay que hacer señores políticos.

LA NUEVA VIOLENCIA URBANA | DISCREPANCIAS sobre LA ESTRATEGIA PARA HACER FRENTE A UN FENÓMENO EN AUGE

 

Mandos y sindicatos policiales piden más dureza contra las bandas latinas

La Mara 13, que capta a chicos de hasta 11 años, ataca a los Latin Kings para quitarles terreno en BCN

Los agentes plantean cambiar de estrategia y asumir que se enfrentan a un grave problema de seguridad

En una corriente que abarca desde agentes que patrullan a pie de calle a mandos intermedios e incluso a algún alto responsable policial, numerosos miembros del cuerpo de los Mossos d'Esquadra consideran que el auge violento registrado en los últimos dos años entre las bandas latinas metropolitanas debe llevar a reevaluar la estrategia con que se está luchando contra este fenómeno. Esa línea de opinión reclama a la Direcció General de la Policia una línea más dura en la que, para empezar, se reconozca públicamente que las bandas latinas son ya uno de los principales peligros para la seguridad en las calles.

«Las bandas son un problema grave en Catalunya. En cambio, muchos mossos, sobre todo los que patrullan en zonas conflictivas, tienen la impresión de que, en las comunicaciones oficiales de nuestro cuerpo policial, intentamos minimizarlo, quitarle hierro o, en ocasiones, negarlo», dice un mando intermedio de los Mossos d'Esquadra.
En la actualidad, incluso el término banda latina es rechazado por Interior. Oficialmente, las pandillas son denominadas nuevos grupos juveniles violentos organizados, una definición académicamente correcta pues no todos esos grupos son bandas y no todos sus miembros son latinos.

ATRACOS EN ESCUELAS / «Hay que cambiar el paso. Hay que poner este tama sobre la mesa, por supuesto no al mismo nivel de la violencia sexista o la multireincidencia, pero sí de un modo contundente», dice un mando intermedio.
«Estamos cansados de que nos digan que 'no existe' un problema de delincuencia que nos encontramos todos los días por la calle y que va a más», comenta el patrullero de un distrito de Barcelona, que relata: «Cada vez son más numerosos y más agresivos. Están cometiendo robos a propietarios de colmados, sobre todo asiáticos, y a chicos cuando salen de las escuelas».
«Tenemos un problema grave con las bandas latinas, no con unos cuantos jóvenes violentos. Cuanto antes lo reconozcamos y pongamos más medios humanos y demos más formación a los patrulleros para que puedan entender símbolos, actitudes y formas de vestir, antes podremos hacerle frente», dice David Miquel, portavoz del Sindicat de Policies de Catalunya (SPC).
Por su parte, Antoni Castejón, portavoz del Sindicat de Mossos d'Esquadra, pide «que se ponga sobre la mesa este problema; hablar de ello abiertamente no solo nos permitirá trabajar sino también hacer prevención con los padres».
TRÁFICO DE DROGAS / La actual estrategia se enmarca en una línea adoptada a nivel político, y no policial, por los responsables de la Conselleria d'Interior y por ayuntamientos como el de Barcelona tras la conversión en asociaciones culturales de los Latin King y los Ñetas. Esta línea ha primado la negociación con estos grupos, para intentar integrarlos en un asociacionismo cívico, ante la respuesta puramente represiva. Además, a la hora de comunicar, se ha apostado por una línea de prudencia para no criminalizar a todo el colectivo de jóvenes latinos y para evitar que declaraciones alarmistas en los medios puedan generar guerras entre bandas. Fuentes oficiales de Mossos responden a esas críticas señalando que «no se oculta nada». «Simplemente no decimos que un incidente está relacionado con el fenómeno de las bandas hasta que no lo tenemos claro», insisten.
Sin embargo, esa política, que dio relativamente buenos resultados y pacificó el caso de los Latin King y los Ñetas, ha quedado desbordada por la irrupción de grupos más violentos tales como las Maras, los Trinitarios o los Bloods. Dos fenómenos han dejado en fuera de juego la anterior estrategia. El primero, en el que se ubica el homicidio el miércoles 1 de un joven latin king a manos de un mara, es la ofensiva que en los últimos meses lleva a cabo la Mara 13, asentada en L'Hospitalet, para conquistar territorios de los Latin Kings en Barcelona. Además, los miembros de esa banda quieren demostrar que son dignos de la fama violenta de las Maras originales y recurren más a la violencia extrema.
La otra razón es la aparición de grupos tales como los Trinitarios o los Bloods, que se dedican al tráfico de droga a pequeña escala. «Con Latin Kings y Ñetas, aunque no eran unos santos, podía haber un terreno de entendimiento. En cambio, con las Maras, Trinitarios o Bloods, solo vale la lógica policial», señala un mosso experto en bandas. Hay un tercer elemento muy inquietante: la captación de chicos cada vez más jóvenes, apenas unos niños, a los que los jefes de las bandas encargan los asesinatos. De hecho, de los tres últimos homicidios cometidos por pandilleros, en dos casos el autor del crimen apenas tenía 14 años. «Tenemos detectados a chicos de solo 11 y 12 años que ya están en las bandas», dice este policía.

FUENTE: http://www.elperiodico.com/es/noticias/barcelona/20101209/mandos-los-mossos-piden-mas-dureza-contra-las-bandas-latinas/616446.shtml